top of page

El pecado recurrente en el matrimonio

  • Foto del escritor: Esposos: Fidel y Janeth
    Esposos: Fidel y Janeth
  • 13 ago 2018
  • 3 Min. de lectura

El pecado recurrente, es aquel con el que luchas a diario y hasta te dices a tí mismo(a) que dejarás y no lo logras. Muchos de estos pecados están relacionados con la mentira, lujuria, pornografía, infidelidad, drogas, juegos de azar violencia e ira, orgullo, soberbia. Pero hay muchos otros que no mencionamos en esta lista y que nos mantienen atados a él, y en ocasiones no lo percibimos como una atadura porque nos ciega.


Dios te ama por encima de tus pecados.

También me gustaría pontificar que no porque tengas un pecado recurrente Dios dejará de perdonarte y limpiarte de todo pecado, al contrario, Él siempre está con sus brazos abiertos esperando tu regreso. Para poder lograr eso de manera permanente es necesario mucho esfuerzo de tu parte que te aseguro, valdrá la pena.

Parte importante de librarte de tus pecados recurrentes es identificar qué es lo que te está llevando a cometerlo, me gustaría hicieras un pequeño análisis de introspección para encontrar la raíz del problema, se sincero contigo mismo, no trates de engañare. Una vez identificado, te invito a leer la siguiente cita de Romanos 7,15 “No entiendo mis propios actos: no hago lo que quiero y hago las cosas que detesto”. Ahora es momento de poner manos a la obra.


Sin Cristo es imposible luchar contra el pecado recurrente.

En muchas de nuestras charlas de parejas repetimos una y otra vez, que el pecado lo llevamos por dentro, y la única forma de luchar con el pecado recurrente, con esos con los que no puedes, es aceptar que eres débil, frágil ante el pecado y decir "Señor, sin tí no puedo, ayúdame con esta lucha diaria que tengo, la cual me tiene atado...".



Sacramento de la reconciliación

Debes también buscar la reconciliación por medio de la confesión y cumplir la penitencia que te sea impuesta. Este te permitirá estar en gracia con Dios, y preparado para el siguiente paso.


Visitar al Santísimo

Debes hacer visitas al Santísimo por lo menos una vez a la semana, otra manera de estar en contacto con él es por medio de comulgar (si puedes haslo diariamente), para que el Señor te vaya limpiando por dentro, y te aleje poco a poco de esa acción del pecado en tu vida, te hará que pierdas esa ceguera que el pecado provoca en tu vida y te hace caer, a pesar que muchas veces estás consciente que está mal.


Asiste a las horas Santas.

Las horas Santas es un momento donde el Espíritu Santo se hace presente con fuerza y vitalidad; la oración, adoración y alabanzas de la comunidad permiten que el Señor camine en ese lugar y toque los corazones de cada uno de los presentes, puedes ver manifestada la mano del Señor por medio de tus lágrimas por medio de las cuales el Señor te lava tus heridas y tu dolor. En ese momento hazte partícipe de todo, levantando tus manos, alabando con tu boca, cantando, haciendo procesión dentro del momento de la entrada (es posible en algunas parroquias), y cuando el Santísimo esté expuesto ve y arrodíllate ante Él.


Aléjate de la tentación

Posterior a esto sé lo más sincero y honesto contigo y aléjate de toda tentación o situación que te ponga vulnerable para cometer pecado nuevamente, el maligno es muy inteligente y astuto para hacerte tropezar de nuevo, pero si estás cerca de Cristo te aseguro el camino estará limpio de obstáculos, sin embargo, seguirán existiendo dificultades de las cuales es imprescindible aprender.


Ora y ofrece toda tu vida al Señor

Sin duda otro factor importante es el ofrecimiento diario (tu trabajo, tu cansancio, algo que te cueste) y que esto a su vez te recuerde ¿Por qué lo estás haciendo? y que no se te olvide pasada una semana de haber iniciado. Ante esto te comparto una de mis estrategias con lo cual he podido liberarme de algunos pecados recurrentes que tenía en el pasado y esto es el trabajar un día a la vez, tal vez esto te suene muy familiar pero en verdad funciona.



Trabaja un día a la vez

Trabajar un día a la vez sin ver los días próximos, olvídate del mañana, enfócate a trabajar en el hoy, el mañana es incierto y del ayer no podremos cambiar nada; trabaja en el hoy para tener un mejor mañana y verás que pasados 21 días habrás formado un hábito que te mantiene cerca de Dios, que si bien en un inicio te costó y fue difícil, pero pasado el tiempo verás cuan fructífero es el esfuerzo que has puesto en ello.


Resumen:

1. Dios te ama sobre todas las cosas, y hasta de tus pecados.

2. Es imposible luchar contra el pecado sin Cristo

3. Confiesate, si no tienes impedimento.

4. Visita al Santísimo y comulga diariamente.

5. Asiste a las horas Santas.

6. Aléjate de la tentación.

7. Ora y ofrece toda tu vida al Señor.

8. Trabaja un día a la vez.


Esposos: Fidel y Janeth

 
 
 

Comments


Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags

© 2018 Ministerio de Vida Conyugal |(+507)6755-0718  (+507) 203-4113

  • facebook-square
  • Instagram - Negro Círculo
  • YouTube - Círculo Negro
bottom of page